Ludi Pucelae IX: Semifinales

¿Quién se coronará con los laureles de la victoria?

En el Anfiteatro Cubierto de Arroyo de la Encomienda, Valladolid, se disputaron las semifinales de la liga Ludi Pucelae, durante las Advanced Castilla & Dragón 2ª Edición. Los jugadores, ansiosos tras diez meses de espera, se reunieron por fin en este encuentro definitivo. ¡Sólo cuatro pasarían!

La partida "Cacería de Esclavos" comienza con la 1ª Prueba: "Dos contra Dos". Los jugadores se enfrentan por parejas, en una batalla de 3 Esclavos y 1 Gladiador cada uno. En la mesa A:

- Pablo, tras su apabullante victoria de la anterior jornada, repite con los CAZADORES (Amarillo); entrena a sus Esclavos II y Bestiario II, y los arma con una Fragua.

- Rodrigo Alonso, CABALLEROS (Dorado), con un temible Esedario III, una buena Armería, y los Médicos, gracias a una carta de Munera.

- Rodrigo, ESCUDOS PEQUEÑOS (Verde), entrena a un Tracio III... ¡No hay que recordar que es mi gladiador favorito!

- Raúl repite con los CELTÍBEROS (Tierra), con unos temibles Esclavos con Honda III, mejorados además con Armadura, a las órdenes de un Caudillo II.

¡Comienza la batalla! Verdes y Tierra contra Amarillos y Dorados. En el sortitio, el Esedario III de Rodrigo Alonso decide no salir a la arena al sacar un "1" en el D12, y en su lugar aparece un pobre (y cobarde) Eques I. Los dos bandos comienzan a acercarse lentamente, cuando de improviso Raúl, el "Señor de las Trampas" (todos recordamos aquel foso), hace surgir de la arena una empalizada mortal, que deja malheridos a tres esclavos rivales. Además, sus Esclavos con Honda ocupan una posición inmejorable sobre la montaña.

Las cosas comienzan mal para los Cazadores de Pablo, que se ven obligados a retroceder para no salir a campo abierto y ser acribillados. Bajo la cobertura de las hondas, el Caudillo Celtíbero avanza por el lateral derecho, y los Esclavos verdes por el centro.

Rodrigo Alonso arenga a sus tropas con brío: ¡Valor Caballeros! Sus Esclavos dorados, jugándose la vida, atraviesan el bosque hacia el Tracio. Incluso el Eques parece dispuesto a cargar contra los enemigos.

Mientras, por el contrario, el Bestiario y los Esclavos amarillos se repliegan. Envalentonado, el Caudillo Celtíbero carga bordeando la empalizada, pero es cruelmente ensartado por sus enemigos, siendo el primer gladiador vencido. En ese momento, Raúl juega su carta de Munera de CRONOS... ¡Y una segunda trampa se cierra sobre los amarillos!

Es suficiente para el Eques que, al verse en inferioridad numérica, huye como una rata hasta el borde contrario de la arena: ¡Los lorarii dan buena cuenta de él, pero salva el pellejo! El Bestiario, viendo su honor en juego, se enfrenta a los Esclavos rivales y consigue matar a algún Celtíbero con su venablo hasta que, al fin, el Tracio sale del bosque (en el que estaba entretenido acuchillando a los Esclavos dorados) y remata al gladiador amarillo, aunque el Emperador le perdona la vida para que siga luchando. ¡Victoria para los Escudos Pequeños y Celtíberos!

Mientras tanto, en la mesa B:

- Dani, fiel a su costumbre de probar todos los equipos, escoge a los ARQUEROS (Morado), y entrena al Sagitarius III. Además, contrata a unas viciosas Meretrices para animar a su campeón.

- José, ACORAZADOS (Blanco), con el indestructible Crupellario III y la ayuda económica que le regala Juventus.

- Álvaro, ESCUDOS GRANDES (Rojo), contrata a un mercenario, el Secutor Traidor, le entrega un Arma Mejorada, y sube a sus tres gladiadores a nivel II.

- Gloria, con AMAZONAS (Turquesa), entrena a sus Esclavas con Arco II y una Cazadora Amazona III, y se hace con el imprescindible Campo de Tiro.

Blancos y Turquesa contra Morados y Rojos. Dani empieza con mal pie, y saca a la arena al Vélite I en lugar del Sagitarius III. Los Esclavos rojos de Álvaro son los primeros en caer, en su desesperado intento de llegar hasta las Esclavas con Arco de Gloria.

Bien adiestradas gracias al Campo de Tiro, las Amazonas hacen cantar sus arcos. El débil Vélite se ve obligado a huir barranco abajo. Lejos de su alcance, a los pies de la montaña, un duelo entre el Crupellario y el Secutor Traidor se decanta también por el blanco, cuando el tramposo Secutor juega una carta de Héroe y se pone en pie casi intacto. El Vélite es alcanzado por una trampa de empalizada, pero también tiene una carta en la manga, "Fingir Derrota", con la que se queda en el suelo boca abajo como si estuviera muerto.

El Secutor Traidor quita su última Herida al Crupellario, pero éste juega una "Finta Asombrosa" para sobrevivir y robar una carta de Maniobra... ¡CRONOS! Activa una segunda trampa de empalizada contra el derribado Vélite, que no sobrevive. ¡Victoria para Acorazados y Amazonas!

En la segunda prueba, "Todos contra Uno", los cuatro colores, con una Fiera Grande y un Gladiador cada uno, van a  enfrentarse a un quinto equipo, manejado por los jueces (y con todos sus luchadores a nivel II). En la mesa A, escojo a los Celtas.

El indisciplinado ejército Celta se divide en dos frentes, cargando por un lado contra el Jabalí Gigante Celtíbero, y por el otro contra el Oso y la Pantera. Los Perros Molosos se entretienen cazando Gladiadores, y atacan al Guerrero Celtíbero. La Pantera retrocede, dejando al Oso y al Bestiario solos contra todos los Celtas, y los amarillos son barridos por los vociferantes guerreros. Al final, todos los Celtas y Celtíberos caen. De nuevo, el Escudo Pequeño y el Caballero son los únicos supervivientes, gracias a su cobarde pero efectiva estrategia de bordear el combate y retirarse a tiempo.

En la mesa B, Luis saca a los Legionarios. ¡Su formación de testudo es un bello espectáculo! Rápidamente son rodeados por las fieras, y las legiones de Roma aguantan la posición sin ceder un palmo...

...Para ser devoradas por las fieras, en un sangriento festín que hace enloquecer a los espectadores ávidos de emociones fuertes. ¡Ñam, ñam!

Los esclavos del anfiteatro limpian la sangre rastrillando la arena, y todo se prepara para la última prueba: "Todos contra Todos".

En la mesa A, Rodrigo Alonso repite su mala suerte, y vuelve a sacar un "1" en el dado azul. Esta vez es su nuevo Eques III, con Arma y Armadura Mejoradas, el que decide observarlo todo desde el pulvinar, dejando su lugar al malhadado Auctoratus I.

En la arena, un enorme Rinoceronte es acosado por una pareja de Gladiadores y otra de Fieras Normales. Además, hay un Carro de Guerra vacío, y el Tracio es el primero en subirse y reclamarlo para sí.

La suerte está del lado de los Verdes ya que, viendo al Rinoceronte a punto de derrumbarse tras una larga refriega, el Provocator juega una "Cólera de los Dioses" y le arrebata su última Herida. Gana una Palma por la proeza, mientras sus Lobos devoran a los Cazadores y el combate continúa a su alrededor.

¡Triple pifia ping-pong! Entre ovaciones, el último Celtíbero cae al suelo con el pecho atravesado por su propia espada de antenas. Ya sólo quedan el Esedario y el Tracio, pero éste último está subido al Carro de Guerra. Y un Tracio III, sobre un Carro, quita nada menos que 3 Dados de Defensa a un rival en el suelo...

Así que, el Esedario, experto conductor de carros, se la juega al Tracio y, con un ataque de despiste, le derriba al suelo. Acto seguido, gracias a un Ataque Adicional, se sube él mismo al Carro de Guerra. Y es un trabajo sencillo rematarlo desde esa posición. ¡Victoria para los Caballeros de Rodrigo Alonso!

En la mesa B, el Crupellario y el Scissor blancos se suben ambos al Carro de Guerra, y una manada informe de pequeñas alimañas rodea al gran Hipopótamo.

Aunque las fieras le quitan casi todas sus Heridas... ¡Es el Vélite de Dani el que se lleva la pieza! El Arquero eleva una plegaria a Neptuno, y, al igual que lo ocurrido contra el Rinoceronte, el Dios responde con una tormenta divina que tumba a la bestia. Con la palma que concede la derrota del Hipopótamo, el mejor jugador de la liga mete un pie en la final. 

Épico es el duelo entre los Acorazados y las Amazonas. Unos y otras luchan como jabatos, sangrando con profusión por numerosos cortes.

Los Acorazados vencen el combate contra las indefensas Amazonas, pero en ese momento son rodeados por los Arqueros y el Secutor Traidor. Con un "Ataque Crítico", el Crupellario es vencido, y las esperanzas de José se deshacen en un charco de sangre.

Los dos únicos supervivientes van a disputar uno de los combates singulares más memorables de este juego. El Sagitarius morado de Dani, dispara flechas sin cesar contra el Secutor Traidor de Álvaro, hasta que éste consigue acercarse y devolverle los golpes.

Durante más de tres turnos, se suceden las cartas de maniobra, los ataques críticos y las pifias (¡hasta un ataque de 7 Aciertos con 3 Críticos y 2 Pifias en la misma tirada!), sin que ninguno de los dos sea vencido. Cada vez que es derribado, el Secutor Traidor no puede ser golpeado, y se levanta por sorpresa. Pero cada vez que es atacado, la armadura pesada del Sagitarius lo protege.

Dani, con su Sagitarius a toque, está a punto de tirar la toalla cuando, en su último ataque, el Secutor Traidor se levanta de nuevo y obtiene la última de sus pifias... ¡Victoria para los Arqueros de Dani!

Mesa A:

Rodrigo Alonso: 20.200 ss. ¡Segundo Clasificado!

Rodrigo: 16.500 ss. ¡Tercer Clasificado!

Raúl: 4.700 ss.

Pablo: 1.600 ss.

Mesa B:

Dani: 24.100 ss. ¡Primer Clasificado!

Gloria: 8.200 ss. ¡Cuarta Clasificada!

José: 6.000 ss.

Álvaro: 3.300 ss.

¡Enhorabuena a todos los campeones!